El Consistorio defiende que se trata de una reestructuración de la plantilla para reforzar la respuesta a la emergencia social provocada por la pandemia aunque llega en medio de la ofensiva de Vox contra un mural feminista.
El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida. — Juan Carlos Hidalgo / EFE
MADRID 26/01/2021
En concreto, los funcionarios de la oficialmente denominada Dirección General de Conciliación y Cooperación Institucional para la Igualdad de Oportunidades se repartirán entre la Dirección General de Prevención y Atención frente a la Violencia de Género y la Dirección General de Emergencia Social y Servicios Sociales.
Según fuentes del área de Familias, Igualdad y Bienestar Social, dirigida por Pepe Aniorte, de Ciudadanos, el objetivo de esta reordenación, que previsiblemente aprobará la Junta de Gobierno dentro de dos semanas, es reforzar la respuesta a la crisis social provocada por la pandemia del coronavirus.
Alegan, asimismo, que la decisión se tomó «la semana pasada o a finales de la anterior», y la desvinculan de la polémica por la eliminación del mural feminista del polideportivo del barrio de la Concepción, promovida por Vox. El barrio de la Concepción se ha unido para reclamar que el mural feminista «no se toque» y en Público hemos iniciado una recogida de firmas para salvarlo y decirle a la ultraderecha que el feminismo no se borra.
Aunque aseguran «que este movimiento en ningún caso esto es una cesión a Vox», lo cierto es que la formación de ultraderecha se afana en cuestionar las políticas feministas, además de en hacer gala de su negacionismo sobre la violencia machista. Sin embargo, según la macroencuesta sobre Violencia sobre las Mujeres publicada en septiembre de 2020, más de la mitad de las mujeres que viven en España ha sufrido algún tipo de violencia machista a lo largo de su vida.
Los representantes de la formación que dirige Santiago Abascal tienen por costumbre no acudir a los minutos de silencio para condenar los asesinatos por violencia de género. Así, dinamitan el consenso político existente sobre esta cuestión desde que se aprobase la Ley integral contra la Violencia de Género en 2004 y se ratificase en 2017 con un Pacto de Estado.
Cese de su responsable
La supresión de esta dirección general supondrá el cese de su responsable, Rosa María Gómez Rivera, que durante el anterior mandato, con Manuela Carmena como alcaldesa, ya fue coordinadora del Área de Políticas de Género y Diversidad.
El Ayuntamiento asevera que se le ofreció reubicarla como «consejera técnica» bajo la nueva estructura y que ha declinado dicha posibilidad, aunque seguirá trabajando en el Consistorio al ser funcionaria de carrera.
Gómez Rivera ha aclarado que ella, mostrando siempre ser una persona «colaboradora y leal con la institución», ha visto que la «confianza está rota» tras un proceso de anexión de subdirecciones con «una metodología inapropiada», del que siempre dio cuenta al delegado, Pepe Aniorte.
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